Nintendo ha anunciado planes para agilizar los cronogramas de desarrollo de ciertos proyectos de juegos como respuesta estratégica a los crecientes riesgos asociados con la producción de videojuegos moderna, especialmente mientras la compañía realiza la transición hacia la era de la Switch 2.
El presidente de Nintendo, Shuntaro Furukawa, informó recientemente a los inversores que los presupuestos de desarrollo en aumento —impulsados por proyectos cada vez más ambiciosos y mayores valores de producción, junto con el aumento de los costos para los consumidores— están haciendo que el negocio de los videojuegos, ya de por sí de alto riesgo, sea aún más precario.
Para abordar este desafío, Furukawa indicó que Nintendo está experimentando con ciclos de desarrollo más cortos para software selecto, viendo esto como una forma potencial de mitigar la exposición financiera.
En una reciente sesión de preguntas y respuestas con inversores traducida, el presidente de la compañía reconoció que los presupuestos de desarrollo se están inflando a medida que los proyectos exigen más tiempo y recursos. Si bien transferir estos costos incrementados a los consumidores mediante precios más altos es un enfoque, advirtió que esto también podría reducir la cantidad de jugadores que pueden permitirse los juegos.
"El desarrollo de software de juegos ha crecido en escala y alcance, lo que lleva a tiempos de producción más largos y gastos más elevados", declaró Furukawa. "La industria de los videojuegos siempre ha conllevado un riesgo significativo, y reconocemos que el aumento de los costos de desarrollo está amplificando ese riesgo".
La Nintendo Switch 2 debutó junto con el primer título de 80 dólares de la compañía, Mario Kart World, después de una generación en la que lanzamientos importantes como The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom tuvieron un precio de 70 dólares.
En ese momento, Nintendo defendió el precio de Mario Kart World enfatizando su propuesta de valor, aclarando que no establecería un nuevo estándar para todas las futuras versiones. La compañía destacó su compromiso con precios variables —como se ve con la colección de 10 dólares Nintendo Switch 2 Welcome Tour y el próximo blockbuster de 70 dólares Donkey Kong Bananza.
Aún así, Furukawa enfatizó que Nintendo está explorando formas de continuar ofreciendo las experiencias únicas e inventivas que los fanáticos adoran, mientras mantiene los presupuestos de desarrollo manejables y los precios de los juegos accesibles para una audiencia amplia.
"Nuestros equipos de desarrollo están explorando varias estrategias para conservar nuestra distintiva filosofía creativa frente a las crecientes escalas de los proyectos y los plazos más largos", explicó Furukawa. "Consideramos esencial invertir en herramientas y procesos que impulsen la eficiencia del desarrollo".
Aquí es donde entra en escena el concepto de ciclos de desarrollo más cortos: la idea de que Nintendo puede producir juegos convincentes delimitando cuidadosamente los proyectos para contener los costos, preservando la calidad y la satisfacción del jugador.
"También creemos que es factible desarrollar juegos de alta calidad en plazos más cortos que aún se sientan frescos e innovadores para los jugadores", concluyó Furukawa, aunque no citó un ejemplo específico. "Vemos esto como un enfoque viable para abordar el doble desafío del aumento de los costos de desarrollo y los precios minoristas, y tenemos la intención de investigarlo a fondo en toda la organización".
Nintendo ha enfrentado previamente críticas de los fanáticos por poner un precio de 10 dólares a la Nintendo Switch 2 Welcome Edition en lugar de incluirla de forma gratuita, como con Wii Sports. La compañía también ha cobrado tarifas de actualización de 10 dólares tanto para The Legend of Zelda: Breath of the Wild como para Tears of the Kingdom, y requerirá que los propietarios de Super Mario Party Jamboree paguen 20 dólares por la versión mejorada de Switch 2, que incluye modos adicionales.